El diablo no soporta los proyectos acabados. Su estrategia es traer otro proyecto y hacerlo parecer más espiritual. Los proyectos incompletos hablan de la intervención de Satanás en cierto nivel del proyecto. El poder de persistir hasta completar un proyecto está al alcance del creyente. Es parte del poder que hemos recibido. Tenemos el poder de completar un proyecto, y luego pasar a otro.
Tenemos el poder de decir: «Habiendo recibido este proyecto, no puedo pasar a otro» La valía de un hombre no se juzga por los proyectos que empieza. Se basa en los proyectos que completa.
Cuando veas resistencia por parte del enemigo, levántate y opone fuerza con fuerza. No cedas ante las fuerzas que desearían que tus proyectos se realizaran sólo parcialmente; que quedaran inacabados. Hay muchas personas que habrían llegado a ser grandes si hubieran completado un solo proyecto. Dios es alguien que completa Sus proyectos.
Los proyectos incompletos son una manifestación de la pereza de un hombre ocupado. Estar ocupado no es sinónimo de trabajar duro. Un hombre que no puede terminar un proyecto no conoce el trabajo duro. Puede estar muy ocupado, pero ocupado sin llegar a ninguna parte. Si no eres de los primeros, sé de los que han terminado la carrera.
Es nuestra responsabilidad canalizar el poder de Dios que hay en nosotros para la realización de proyectos. Los pastores del pueblo de Dios deben elaborar planes para garantizar el uso de este poder abundante. El poder de Dios en ellos no debe desperdiciarse, aunque esté disponible en cantidades inagotables.
La soberanía divina no tolera el despilfarro. El desperdicio de tiempo, dinero y oportunidades es intolerable ante Dios. El poder de ordenar cinco panes para alimentar a cinco mil personas también está disponible para dar la orden de recoger las sobras en doce cestas.
El poder de llevar adelante un proyecto no depende de las emociones. Las emociones se dan para iniciar un proyecto. Puede que no siempre estén disponibles para continuar el proyecto. La continuación del proyecto dependerá a menudo de la fe. Somos creyentes, no personas emocionales. La fe nos da la fuerza para seguir adelante cuando no hay un gran crecimiento, y la fuerza para seguir adelante cuando hay escasez.
Dos valen más que uno
Todo pastor del pueblo de Dios necesita un co-pastor. Esta persona estará a su lado cuando tenga ganas de rendirse. Necesita el apoyo externo de un buen co-pastor en el que pueda confiar para todo.
En un momento de su vida, el pastor Yongi Cho pensó en el suicidio. Recuerda que tiene la mayor congregación del mundo. Pero unas cuantas personas acudieron a su rescate y le salvaron. Estas personas habían creído en él en su hora más oscura. Su fe lo salvó. Su recompensa en el cielo será grande.
Todos necesitamos el poder de creer en las personas y seguir creyendo en ellas incluso cuando todo parece negro. ¿Eres esa persona en la que alguien confía para tener éxito? Los hombres que creen en un hombre incluso antes de que haya pruebas visibles de su valía son extremadamente valiosos.
Pedro y los demás discípulos sólo habían seguido un testimonio interior del Espíritu Santo sobre el Señor Jesús. No habían dudado de Él. El nombre de Judas no está en los cimientos del cielo porque dudara. Sólo había sido necesario un acto de fe y de confianza en el testimonio interior, cuando Jesús, sin haber hecho ninguna obra visible, dijo a Pedro: «Ven y sígueme». Nosotros tenemos hoy suficientes elementos en los que basar nuestro seguimiento de Jesús. Ellos no tenían los hechos y las pruebas que tenemos hoy. Simplemente creyeron a Jesús.
El poder de guardar las ovejas
Deberíamos poder decir, como nuestro Señor: «No he perdido a ninguna», cuando se trata de las personas que Dios nos ha dado. Junto al programa para ganar nuevas ovejas, debe haber un programa para traer de vuelta a las ovejas perdidas. Existe el poder de ganar las ovejas, y también el poder de conservar las que se han ganado, y el poder de restaurar a las que han caído. Tú tienes ese poder.
Cuando una oveja ha fracasado, es cuando más necesita amor. El retrógrado es alguien que ha caído. Hay que darle el más cálido de los abrazos. Una cosa que mantiene a los retrógrados en regresión durante demasiado tiempo es la duda de si serán aceptados o no por los hermanos que han permanecido fieles.
Tienes el poder de amar a los atrasados. Tienes el poder de amar a los que no son dignos de amor.
Extracto del libro: Principios fundamentales del liderazgo cristiano – Z.T. Fomum